Entrenamiento para el Control de la Ansiedad

Tengo el honor de ser amigo de un gran director de cine ecuatoriano. Encuentro su trabajo particularmente interesante, pues debe combinar una serie de elementos de producción cinematográfica, no sólo para contar una historia a través de la interpretación de sus actores, sino para generar emociones en la audiencia. Una de estas emociones es la ansiedad.
El efecto sobre los espectadores se da no sólo por la calidad de actuación sino por los efectos que el director imprime en la filmación: la luz, los ángulos de las tomas, la música de fondo, sonidos, volumen, colores, y un gran etcétera.
Tome las mejores escenas de las películas que recientemente recibieron los Premios de la Academia y quíteles el sonido. Notará que pierden poder. Quite los colores y vea la película sólo en blanco y negro, y no percibirá las mismas emociones. Vea la misma toma en una pantalla de 14 pulgadas y notará que no siente lo mismo que cuando la ve en el cine.
Algunas personas se asustan, sienten felicidad y hasta lloran con más de una película, aún sabiendo que es actuación pura, casi siempre ficción y fantasía. Eso sólo es posible gracias a la buena calidad de la producción.
Es muy frecuente tener emociones similares en el deporte, pero claro, el deporte es totalmente real.
Comenzando a entrenar su ansiedad
Al final del ejercicio que le voy a proponer en seguida, habrá aprendido a controlar un poco mejor su ansiedad. Para hacerlo trate de disponer de unos diez minutos en los cuales no sea interrumpido.
Importante: Lea las instrucciones antes de poner en práctica este primer ejercicio.
  • ·      Recuerde un momento muy desagradable y reciente de su práctica deportiva, en el cual alcanzó niveles de ansiedad tan altos e incontrolables que lo llevaron al fracaso (si usted no es deportista y lee este artículo por curiosidad, piense en una escena negativa de su vida profesional o personal).
  • ·      Una vez que haya escogido este momento y definido exactamente cuándo y dónde ocurrió, trate de volver en su imaginación a ese instante. Mire lo que estaba a su alrededor y concentre su atención en lo que más le molestaba. Puede tratarse de más de una cosa o persona. Pueden ser cosas que haya visto, escuchado o sentido.
  • ·      Note que mientras más se concentra en los detalles que le molestan, la intensidad de la emoción la intensidad de la emoción negativa también se vuelve mayor.
  • ·      Haga el ejercicio ahora siguiendo los tres pasos: Escoger un momento, concentrarse en los detalles negativos y percibir la emoción. Cuando termine siga leyendo.
 Ahora está listo para el segundo ejercicio. Recuerde leer las instrucciones hasta el final antes de comenzar a hacerlo.
  • ·      Tome el mismo recuerdo del ejercicio anterior y los mismos detalles que lo hicieron sentir ansiedad y malestar.
  • ·      Cambie las características de los detalles como si fuera un director de cine. Ponga la escena en blanco y negro, vea las cosas más pequeñas o haga una toma más lejana en la que el detalle molesto se pierda dentro del entorno. Elimine el volumen o agregue ruidos que no lo dejen escuchar lo que le molesta. Agregue olores agradables, calor o frío, de tal forma que sus sentidos se distraigan de los detalles. Recuerde que usted es el director de esta película y haga los cambios que le gusten.
  • ·      Haga ahora el ejercicio y note como las emociones cambian a medida que cambia las características de la escena. Cuando termine de hacerlo continúe leyendo.
Para este momento usted sabe que puede con su imaginación generar emociones aunque en la realidad no esté haciendo nada. Ahora lea las instrucciones del tercer ejercicio antes de hacerlo.
  • ·      Escoja un momento reciente de máximo rendimiento, en el cual hizo las cosas muy bien y por el cual siente mucha alegría.
  • ·      Observe los detalles que mejor le hacen sentir. Recuerde que son cosas que puede ver, escuchar y percibir. Concéntrese en uno o dos detalles, los más importantes e intensos.
  • ·      Como un director de cine explore tomas con diferentes ángulos, distancias y colores buscando la que produzca emociones positivas más intensas. Haga lo mismo con los sonidos, suba o baje el volumen, cambie la distancia y el ángulo de donde provienen. Aumente en su imaginación sensaciones que producen bienestar. Calibre los cambios, y mantenga sólo los que hacen que la emoción sea más positiva e intensa.
  • ·      Haga ahora el ejercicio. Luego siga leyendo.
Le recomiendo que practique varias veces el tercer ejercicio. Úselo cuando esté entrenando y cuando esté compitiendo. Igual que en la práctica deportiva, mientras más veces lo haga, mejor le saldrá.
Los recuerdos están asociados con emociones. Al traer el recuerdo generamos en el cuerpo la emoción que lo acompaña. Es algo completamente natural. Si como directores de cine controlamos los elementos de la escena que recordamos, podemos hacer que la emoción sea más o menos intensa. De esta forma podemos generar una emoción positiva en momentos de ansiedad y mantenerla bajo control. Ello no garantiza que siempre se vaya a ganar la competencia, pero se tendrán más probabilidades y definitivamente será más agradable.
(Publicado en CLUBES LA REVISTA en abril 2009)